Las empresas bolivianas pierden casi $us 2 millones al año a causa de la violencia contra la mujer, según informó Inti, que como empresa busca alianzas para reducir el maltrato a este segmento de la población.
El dato sobre este fenómeno, que también afecta la productividad laboral, fue revelado luego de una investigación propiciada por la Cooperación Alemana. “La violencia contra la mujer no solo tiene consecuencias económicas negativas en las empresas, sino que trasciende a niveles más profundos porque refuerza otras formas de violencia, daña y desintegra a las familias, mucho más a los hijos, e impide que las mujeres se realicen de manera personal y profesional. Es un costo social muy alto”, afirmó Christian Schilling, gerente general de la farmacéutica.
Para dar ejemplo de lo que se puede hacer respecto a esta problemática, la compañía respeta y contribuye a la equidad de género (el 50% de su personal está compuesto por féminas); cuenta con la certificación estatal Sippase, que garantiza que ninguno de sus empleados tiene antecedentes penales de violencia ejercida contra una mujer o cualquier miembro de su familia; y organiza talleres de prevención para todos sus colaboradores, además de campañas internas de sensibilización y atención psicológica y legal a las víctimas que hayan sufrido el maltrato.
“En la empresa privada se requiere la decisión y voluntad de las altas gerencias para que implementen políticas organizacionales de cero tolerancia a la violencia contra las mujeres y se promueva la equidad de género”, dijo el ejecutivo de Inti, la cual busca alianzas y quiere inspirar a otras instituciones y empresas nacionales para que se comprometan, asuman e implementen políticas organizacionales que luchen contra esta problemática.
‘Valor’ para denunciar
Inti creó el medicamento simbólico “Valórate, yo quiero”, que contiene “500 mg de Decisión, 300 mg de Valor y 200 mg de Autoestima” y es repartido a quienes lo necesiten.
No hay comentarios:
Publicar un comentario