Desde la promulgación de la mencionada norma, el pasado mes de marzo, los índices de violencia física y psicológica han sido los delitos en que más han incurrido los varones, por lo que han sido puestos a disposición del Ministerio Público de acuerdo con la norma, declaró la autoridad.
La coronela Meneses explicó que, además, la FELCV, que está aún en etapa de transición pero que aplica la Ley 348, atendió también 110 casos referidos a violencia ejercida en contra de niñas, niños y adolescentes.
“En el caso de niñas, niños y adolecentes, hemos atendido casos de maltrato y explotación, pero lo más preocupante hemos hallado a menores en estado de ebriedad”.
Antes de la promulgación de la nueva norma y la creación de la FELCV, la Brigada de Protección a la Familia atendía entre 25 a 30 casos por día, pero los sospechosos o sindicados lograban conciliar en las puertas de esa unidad policial para evitar sanciones. Ahora, la norma no permite la conciliación.
“Este índice se ha incrementado con la nueva ley, porque además se ha socializado la misma. Ahora, las mujeres conocen sus derechos y, por eso, también atendemos más casos al día que van entre 30, 40, 50 hasta 60. A pesar de la falta de infraestructura, el personal de la FELCV trabaja las 24 horas continúas elaborando carpetas dentro de las ocho horas que establece la norma y recogiendo las evidencias en el lugar de los hechos”.
Problemas con los certificados médicos. Meneses dijo que en El Alto, a diferencia de otros años, las mujeres conocen sus derechos y que actualmente una de cada 10 mujeres sufre violencia por razones de género.
Recordó que existen siete tipos de violencia, entre las que destacan la violencia física, psicológica, feminicida, sexual y otros.
Empero la autoridad dijo que, pese a que la norma ya está en vigencia, se tropieza aún con la obtención de los certificados médicos en los centros de salud. “La norma establece que el certificado médico debe ser emitido en casos de violencia de forma inmediata por las autoridades sanitarias, pero éstas aún son incumplidas”.
Actualmente, son ocho los efectivos bajo la dirección de la coronela Basilia Meneses, que trabajan en la FELCV.
"Somos cuidadosos a la hora de recolectar las evidencias en caso de maltrato por razón de género o feminicidio".
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