El 72 por ciento, la gran mayoría de las titularías en las asambleas legislativas departamentales son ocupadas por los varones y sólo el 28 por ciento son mujeres, que tienen restringido su poder al ser excluidas de puestos decisivos, sino son suplentes, según el informe.
Pando tiene sólo dos mujeres del total de 16 asambleístas, Santa Cruz cinco de los 28, Cochabamba seis de los 34, Chuquisaca seis de los 21, Oruro siete de los 33, Potosí ocho de los 32, Beni 13 de los 28, La Paz 14 de los 45 y Tarija 15 de los 30. En general, existen 76 mujeres y 191 varones titulares del total de los 267 asambleístas en los nueve departamentos.
Las desigualdades de género son tan arraigadas en la práctica política que incluso con la aprobación de las nuevas normas que de manera explícita obligan a garantizar la igualdad de género en la participación, persiste el incumplimiento de la paridad.
El artículo 9, de la Ley de Régimen Electoral Transitorio señala que “las listas de candidatas y candidatos a (…) asambleístas departamentales, deberán respetar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, de tal manera que exista un candidato titular varón y enseguida una candidata titular mujer, una candidata suplente mujer y un candidato suplente varón, o viceversa”.
En un contexto en que las mujeres están todavía en minoría se convierte en un desafío garantizar la equidad de género, que salga del papel y se concrete en la realidad; que las demandas específicas de las mujeres se traduzcan en los estatutos departamentales, normativas, políticas elaborados fortalecer las alianzas para avanzar en la eliminación de los obstáculos y sesgos de género que afectan el ejercicio de poder en igualdad de condiciones, destaca.
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