Estupefactos, un grupo de bomberos de la comunade San Fidenzio, en la ciudad italiana de Padua, tuvieron que acudir a resolver una curiosa situación. Una mujer residente en esa localidad del norte del país europeo necesitaba que la liberaran de su cinturón de castidad, pues había perdido su llave.
De acuerdo con una nota del diario local II Mattino dik Padova esta mujer de más de 40 años llamó a los bomberos y les pidió ayuda pues había extraviado la llave de una cerradura en su casa, sin explicar con detalles de qué se trataba exactamente.
No fue hasta que se personaron en el domicilio de la mujer que los bomberos comprobaron estupefactos que se trataba de la cerradura de un curioso artefacto, un dispositivo truculento destinado a impedir las relaciones sexuales y hasta la masturbación.
Apenas lograron liberarla, eso sí, con mucho profesionalismo, los mismos bomberos le preguntaron si había sido obligada por alguien a portar semejante artilugio, tras lo cual la señora les respondió que ella misma había tomado la decisión, convencida de que no quería tener más relaciones sexuales y como una meta a seguir en este año que recién comienza.
Se trataba simplemente de una garantía de abstinencia. Nada le había exigido que lo llevara consigo día y noche. Solo que, sin querer, había extraviado la llave.
Apenas estuvo liberada, la dama italiana les agradeció a los bomberos por su profesionalismo y por su eficiente trabajo.
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