domingo, 31 de julio de 2011

'No es fácil ser policía, la diferencia la hace uno' Lily Cortez | Subcomandante Dptal.

Es cruceña, rubia y tiene don de mando. No por nada es la única mujer que ha logrado escalar tan alto en la institución policial (es coronel). Hace poco fue posesionada como subcomandante de la Policía Departamental y quisimos saber cómo es esta dama que viste el uniforme verde olivo, tradicionalmente de varones.
Descubrimos que Lily Cortez es muy femenina pese a las botas que calza y el uniforme masculino. Se presentó a nuestra sesión de fotos con el cabello recogido en un moño y los ojos, labios y cejas bien delineados con maquillaje definitivo.
Sin duda posee el carisma y la amabilidad que caracterizan a la mujer cruceña. Nos dio gusto hablar con ella.

¿Qué la movió a estudiar para ser policía?
Desde que estaba en el colegio me movía el interés de cooperación a los demás; cuando se me presentó la oportunidad postulé a la Academia de Policías enfrentando un reto, por lo nuevo que suponía la incursión de la mujer en la institución. Me costó mucho trabajo el romper paradigmas ya establecidos en un lugar donde la mayoría era del sexo masculino, pero conseguí culminar mi carrera profesional y me siento orgullosa de lo que soy y de lo que logré.
¿Cree que ser mujer le da una nueva perspectiva al oficio de policía?
La participación de la mujer le da una dinámica y perspectiva muy especial. Las mujeres somos las más indicadas para las tareas de investigación relacionadas con delitos de violencia doméstica, violaciones, trata de personas, etc.
¿Cómo cree que puede hacer la diferencia desde su cargo como subcomandante de la Policía Departamental?
Considero que cada jefe u oficial, sea hombre o mujer, cuando asume un cargo nuevo tiene planes, estrategias y programas propios para realizar de la mejor manera su trabajo; en ese entendido la diferencia la hace uno. Por mi lado, quiero instar a que todos los subalternos tomen el camino de la obediencia, la honestidad y, sobre todo, que su accionar esté enmarcado en el respeto a los derechos humanos.
¿En casa sigue siendo la misma persona? ¿quién manda, usted o su esposo?
Soy la misma persona en cualquier parte. En mi casa nadie manda porque la relación con mi esposo, con algunos tropiezos como en cualquier hogar, está basada en la equidad, en la comprensión y en la libertad.
¿Sabe cocinar? ¿cuál es su especialidad?
Como toda mujer sé cocinar. No tengo especialidad, pero me gusta preparar los platos típicos de mi tierra, el locro, el majao y el picante de gallina.
¿Qué es lo más difícil que le ha tocado enfrentar en su formación como policía?
Las acciones discriminadoras en contra de las mujeres que ingresaban a la Policía fueron evidentes y creo que mucho más elevadas que en otras profesiones. Las normas y códigos relacionados con la masculinidad eran ponderados en mayor medida que los femeninos. La superación de todos estos aspectos negativos todavía está en marcha y poco a poco están desapareciendo. Aplaudo que la participación de la mujer en el contexto institucional es cada vez más importante.
¿Cambiaría su oficio por cualquier otro?
No. Además de ser un privilegio para mí ser policía, ocupa la mayor parte de mi vida, tanto profesionalmente como personalmente.
¿Se siente femenina a pesar del uniforme verde olivo?
Sí. Todas las mujeres poseen características y cualidades distintivas y propias de mujeres. Creo que estas características son su fortaleza a la hora de actuar, tomar decisiones y hacer frente a un problema.
Cuando no está en servicio ¿es asidua a las fiestas sociales?
Por el tiempo y la naturaleza del cargo que ocupo, no soy muy asidua a las fiestas.
¿Qué le gusta vestir cuando no está con uniforme?
Cuando estoy en mi casa lo más informal posible, cuando salgo a la calle visto acorde a la situación y las circunstancias que se presenten, soy muy cuidadosa y selectiva.
¿Cuáles son sus planes inmediatos desde el cargo que está ejerciendo?
Reducir los índices de inseguridad, dándole mayor tranquilidad a la sociedad y debo decir que estamos en ello.
¿Qué le dice a otras mujeres a las que les falta animarse para seguir sus pasos?
Que postulen a la Universidad Policial, aunque con sinceridad debo advertirles que ser policía no es fácil y por ser mujeres implica un esfuerzo mayor que requiere por un lado, temple para tratar con la gente, y por el otro, carácter para imponer autoridad, además de condición física para perseguir y enfrentarse a situaciones de riesgo.
Los avatares de la profesión permiten crecer como persona, es un trabajo que aporta diferentes cosas, pero todas son positivas.

Su perfil

Su nombre completo es Lily Cortez Ávalos. Está casada con un coronel de la polícia hace 27 años y tiene tres hijos.
Salió bachiller del cocolegio Mariscal Sucre de Santa Cruz.
Postuló con 120 mujeres a la Universidad de Policías en La Paz, donde solo admitieron solo a 13, de estas egresaron cuatro después de cuatro años de estudios.
Actualmente hay cuatro damas en carrera (para llegar al grado de general, que no posee ni una mujer en el país). Lily es la única que ha logrado llegar lejos con el cargo de subcomandante de la Policía Dptal.


1 comentario:

  1. Pinche zorra si todos saben que es una culo alegre y sehizo tirar por medio gobierno para ser nombrada comandante de la Policia pero le ffallaron y pr eso estaba indignadisima eso le pasa por zorra vieja puta

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